sábado, 9 de diciembre de 2006

NEGOCIAR

Maribel tiene ojos muy verdes, pero mucho. Y mas aún cuando los tengo entre mis piernas. No admite negociación, no quiere tragárselo, no quiere que yo cierre mis ojos y vuele, no quiere eliminar el rastro, no quiere que mis riñones griten, no quiere sentir mis olas en su boca, no quiere volverme loco, no quiere mi paz y su gloria, no quiere mis demonios y mis ángeles,no quiere que la recuerde para siempre, no quiere y no quiere.

Negociamos. No tengo suficiente.

Salgo del garito, jodido con la vida y con Maribel, ojos verdes.

Un cigarrito... música y arranco...

La vida, a veces, es una puta gorda con la que no hay negociación posible. Te las promete sin condón y acelerando hasta el final... al final, abres los ojos y lo descubres entre sus dientes... al final solo queda el color de sus ojos y unos riñones que jamas aprenderán a gritar.


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