LE GUSTAN LOS BLANCOS

Adisha se me pegó a la pierna izquierda nada más conocerme y siempre que puede anda arrimada.

Si pasa dos días sin verme, el abrazo a la pierna es la hostia.

Si pasa dos horas sin verme, el abrazo a la pierna es la hostia.

Si pasa dos minutos sin verme, el abrazo a la pierna es la hostia.

Nunca pide nada. Nunca habla. Solo sonrie y se aprieta. Si alguien se acerca más de lo que ella considera prudente, se pone delante con los brazos en jarras y su actitud desafiante me dificulta un poco las relaciones sociales en su entorno.

A mi no me gusta que lo haga... pero la sé feliz haciéndolo.

- Le gustan los blancos, me dijo un día su madre.- desde que comenzó a andar, blanco que ve, blanco al que se pega.

A sus 8 años, Adisha me ha convertido en peluche gigante.

- Cuando te vayas.- me dice su madre.- mejor no te despidas.

- ¿Y no me echara de menos?.- pregunto.

- No te preocupes, siempre llegan blancos nuevos.