Hora es de largarse.
Mientras acudía al desayuno continental, he visto como la chica del pelo corto amontanaba sus maletas con las de sus padres en la entrada del hotel. He pasado a su lado por última vez. Creo que hubiéramos follado como dioses. De cualquier modo tengo un buen número de fotografías suyas tumbada en la hamaca en distintas posiciones y con distintos bikinis, así como de otros momentos de sus días de hotel. También algún vídeo. Con eso tengo para pelármela durante, al menos, una semana. Para entonces ya habrá pasado a la parte de mi corteza cerebral donde se almacenan los polvos y los besos que nunca sucedieron.
He quedado con el Ojazos en el ático. Las chicas me han besado por turnos. Nadia me ha escrito un poema sobre esa parte que tengo muerta y que siempre va conmigo. Carmen me ha metido la lengua tan dentro que por un momento he pensado que nunca podría sacarla y nos quedaríamos unidos para siempre. El Ojazos ha llegado. Me da mis 8.000 leuros y 2.000 más por que le sale de los cojones. Dice que me quede, que Carmen me monta un par de pisos. Que soy legal. De una cosa me he dado cuenta, las putas que tienen cerca el mar parecen menos tristes que aquellas que no lo tienen.

El Ojazos me lleva al hotel. Por el camino veo a mi colosal africana colocando el tenderete de peluquera de rastas en el paseo marítimo. Semáforo en rojo. La silbo. Se gira. Me saluda con la mano abierta, la cierra, se la lleva a la boca, le dice cosas al puño cerrado, lo abre hacia mi, una brisa helada golpea mi cara con su olor. Más magia africana. Se lleva las manos a las tetas y las junta también para mi. Me empalmo. Semáforo en verde.
Zampo en el hotel con la nueva cucaracha. Le pido que me alquile un coche a su nombre. Le doy mucho dinero para que lo haga. Me dice que vendrá a Madrid pronto a conocer a los demás. Le digo que nadie conoce a nadie en las cucas. Se pone tristón... dice que le hubiese gustao fumarse un peta con el musiketa.

Bañito y ducha. Hoy no hay pajas ni sexo. He quedado con un conocido para pillarle un poco de tema del rico. Si lo que cuenta es cierto, los 4.000 euros que pienso darle los triplicaré en Madrid. Una hora de margen en el primer chiringuito a la derecha del puerto de Aguadulce. Sólo le he visto una vez, en una grabación de un programa de televisión. En vivo tiene cara de serpiente, nariz de ave de presa y manos de agricultor. Sonríe grande. Una cerveza helada. Algunas risas sobre temas comunes. Intercambio de chocolatinas por dinero. Otro apretón de manos. Él para Aguilas y yo para los madriles. Su cara me suena... pero de otras movidas... con más humo, más ruido y gente con cascos azules tiraos por los suelos y meándose en los pantalones... en esas movidas su sonrisa era la misma... o igual sólo se le parece.
El coche es un monovolumen con asiento de niño detrás, bastante familiar. No quiero dar el cante. Si me pillan con lo que voy a llevar dentro, alguien se va a descojonar muy mucho. El cucaracha me lo ha dejado a la puerta del hotel. Las llaves en recepción.
Ceno.
Paseo descalzo por la playa...
Me fumo un par de liaditos con la mierda nueva. Hostias.. es buenaaaaaaaaaaaaa. Con la maría no me pasa, pero con el polen me dan puntos muy raros... saco la camarita... y sale esta mierda de vídeo...
De vuelta al hotel se me cruza un coche con una pareja de enamorados policías nacionales. Ella felizmente embarazada. No me han visto. Mejor. Y es que las cucarachas decimos la verdad incluso cuando mentimos... Jamás me hice la vasectomia... Cuando me enteré como era la operación, pasé como de comer mierda....
Por cierto, que despiste... aun no me presentado... y tantos días juntos...
y suelo dejar polluelos en nidos ajenos...
Y ha sido un placer.....
