Siempre es agradable traspasar el umbral del burdel en navidad. Hoy esta cerrado, excepto para los habituales. Las putas sonríen más de lo normal, que es cero normalmente. El camarero te llena más la copa. Los compañeros de noches y putas nos saludamos cortésmente. La chica del guardarropa es nueva. La maquina de música funciona con villancicos y coplas arrebatadas.
Bailamos. Celebramos la vida y la distancia a la que estas fechas colocan los malos tiempos que fueron hace un instante. Piso bastantes pies. Ellas cacarean mi torpeza en el ámbito de la danza. Yo admiro sus cuerpos torrenciales y el ritmo y la cadencia. Ellas admiran mi Visa Oro que me esta arruinando.
Sabedoras de secretos jamas entendidos, utilizan la navidad como medicina para los huesos de sus caderas y sus pelvis. No hay amor en Navidad... pero hay esperanza.
En navidad, en este burdel, las putas elijen marido, de entre los presentes, para una noche de encantamientos y significados.
Mientras el mundo celebra el nacimiento de una leyenda urbana hace 2008 años, mi puta- esposa-porunanoche cabecea contra la colcha de flores a cuatro patas y cagándose en Dios me pide toda la polla dentro. Soy un buen marido y cumplo con mis labores de consorte temporero.
Al terminar, me dá un piquito... se levanta de la cama... se mete una puntita de coca... se asoma a la ventana. La luz marrón de las farolas ilumina su rostro y su cabeza despeinada. Se coloca el pelo y fuma. El humo golpea el cristal y se expande.
- ¿Que tal noche hace ahí fuera?.- pregunto desde el lecho nupcial.
- Llueve cariño ........ siempre llueve mierda.
Bailamos. Celebramos la vida y la distancia a la que estas fechas colocan los malos tiempos que fueron hace un instante. Piso bastantes pies. Ellas cacarean mi torpeza en el ámbito de la danza. Yo admiro sus cuerpos torrenciales y el ritmo y la cadencia. Ellas admiran mi Visa Oro que me esta arruinando.
Sabedoras de secretos jamas entendidos, utilizan la navidad como medicina para los huesos de sus caderas y sus pelvis. No hay amor en Navidad... pero hay esperanza.
En navidad, en este burdel, las putas elijen marido, de entre los presentes, para una noche de encantamientos y significados.
Mientras el mundo celebra el nacimiento de una leyenda urbana hace 2008 años, mi puta- esposa-porunanoche cabecea contra la colcha de flores a cuatro patas y cagándose en Dios me pide toda la polla dentro. Soy un buen marido y cumplo con mis labores de consorte temporero.
Al terminar, me dá un piquito... se levanta de la cama... se mete una puntita de coca... se asoma a la ventana. La luz marrón de las farolas ilumina su rostro y su cabeza despeinada. Se coloca el pelo y fuma. El humo golpea el cristal y se expande.
- ¿Que tal noche hace ahí fuera?.- pregunto desde el lecho nupcial.
- Llueve cariño ........ siempre llueve mierda.




















