DELFINES

Esta noche me obliga el buen gusto y me voy a la Plaza de los Delfines, puedo elegir para cenar La Casa de Aragón, Arturo y el Mayte Comodore. Elijo el último por su codorniz en escabeche o sus setas, pero sobre todo por que puedo ver a los delfines mojarse en la fuente, lo que no se ve del Mayte me trae buenos recuerdos.

Salgo y unos diez metros hacia Castellana tengo varios garitos seguidos, pared con pared, donde tomo unos roncitos y gracias a la música puedo pensar sin hablar.

Unos seis metros abajo esta el mendigo borracho, vive debajo del puente, hoy esta metido entre las mantas y cartones sin moverse.

Hay noches que me quedo mirándole, mueve la cabeza de un lado para otro y habla solo. Me acerco y le toco... se mueve... ¡sigue vivo!. Mi acompañante se ha quedado enfrente ,no quiere acercarse... ¡algún día le meteré mi lengua en su boca para no oir su voz!.

Me voy al Seis Peniques de Castellana, para rematar con un café irlandés de los mejores de Madrid. Al irnos le digo a mi acompañante que pare un taxi mientras hecho una meada. Al salir la veo hablando por la ventanilla de un coche con un chaval joven, el Golf rojo se va y me dice "tengo cara de puta".

Miro la calle a esa hora ya están trabajando las putas de la zona y me dice "el cabron me ha dicho que cuanto cobro", paro un taxi, le meto la lengua en la boca, se aleja en él y me voy con una puta.