Fuimos a disfrutar de aires puros y vida sana a la sierra de Madrid.
Esa noche ya estabamos contaminados de ausencias de humos, olores y ruidos. Preguntamos por un lugar para olvidar. El nombre, OLIMPO, decidió el resto de nuestras vidas. Al cruzar el umbral, una sala dorada.
Ella fue la cuarta en acercarse. Marie. Del sur de alguna parte de Paris. Es la única que no mastica chicle de menta, el suyo es de melocotón. Charlamos mucho. Subo con ella.
Todas las putas tienen algun moraton en las piernas, el suyo es de un golpe en el gimnasio, o eso dice. Ha alquilado habitación hasta septiembre en este hotel. Lava mi polla con gel de marca francesa. Mamada con condón, apenas noto como lo pone con la boca. Se pone encima y me cabalga. Me habla en frances, me folla en frances. Me corro con ella a cuatro patas. Finje sin estridencias. Acaricio su cara tumbada a mi lado. Me pregunta a que me dedico. Hago "chanson", le respondo. ¿Me harias una?, pregunta. Sólo si me besas, contesto....

Dedicado a todas aquellas personas que comparten, han compartido y compartiran momentos de vida en lugares Olimpicos. En especial a
Santi el Montador,
al Litos y a Marie.