miércoles, 5 de enero de 2011

MAGIA EN REYES

Abre su armario.

Elije tres prendas: Un vaquero, un jersey marrón y un par de calcetines.

Los envuelve uno a uno, con paciencia y delicadeza, en brillantes y coloridos papeles de regalo. Coloca los tres paquetes al fondo del minusculo salón y sobre ellos cuatro paquetes más.

Sonrie satisfecho. Todo esta bien.

Llamán a la puerta. Abre. Ante él dos pequeños muy nerviosos intentan zafarse de la mano de su ex-mujer.

- Comes con ellos y a las 6 de la tarde me los llevas...

Las manos se abren. Los pequeños cruzan veloces hacia el salón. El se despide con torpeza y cierra la puerta. Ella escucha los gritos velados de los niños ante los regalos, se gira, vencida, y llama al ascensor.

La más pequeña salta al ver tantas sorpresas...

El mayor dice que los Reyes han traido más regalos aqui que en casa de los abuelos.

Abren uno a uno los paquetes... sin delicadeza... con furia infantil y los ojos muy abiertos.

Él sonríe satisfecho... los sabe felices...

- ¡Abre uno tuyo Papa!...

Elije al azar... abre el del jersey marrón... y orgulloso lo muestra a sus pequeños...

- Jo que bien, papi... es como el del año pasado... ese que te gustó tanto... ¡Que bien!..., ¡Ya tienes dos iguales!...

El padre intenta tragar saliva. Gira la cabeza y mira lejos, a través de la ventana... No le apetece que sus hijos vean sus ojos en este momento...

En la calle, la madre enciende un cigarro y dá una patada a un algo invisible...

De nuevo... todo es mágia en otra feliz mañana de Reyes...


4 comentarios:

Jezabel Montenegro dijo...

La mezcla del universo infantil y el universo adulto, siempre me da hambre de comida china. Cerdo agridulce, concretamente.

Belén dijo...

Bueno, la magia siempre existe, pero lo que hay que hacer es mantenerlo vivo, como una llama...

Besicos

Butter dijo...

Eso debe ser que el espírito de la Navidad le embarga; pobrecito.

Noah dijo...

Deben de ser de los pocos adultos a los ke les jode ke se acabe la navidad, si, seguro ke es eso.
Besos.