MULATA CASI NEGRA

Mulata, casi negra, de negros ojos y negros pezones. Me da su cola, su culo para que se la meta y se mueve traviesa al compas de mis dilemas existenciales. Sólo pienso cuando follo, asi que pienso demasiado. Entrar en su coño de Guinea es arropar la polla en un lecho caliente que palpita akunas matatas y atardeceres de sabanas entre sábanas de piernas largas y olor a tierra, de manos oscuras con uñas como aguijones.

Me indica el lugar exacto donde mi lengua ha de golpear su clitoris... un poco por debajo... como a casi todas, sé que les gusta sentirse profesora y puta creyéndonos a los hombres ignorantes. A veces me equivoco para que me regañe y me guíe y me coloque y me abra su coño con las dos manos, rosado e intenso como pulpa de granada y de igual modo, chorreante. Le gusta que le follen negros... y yo. Despues me llamará osito panda mientras deja que mi lefa se cuele entre sus encias... su sonrisa con amor. Ahora duerme plácida a mi lado mientras acaricio su espalda, la espalda de Africa,.... mulata, casi negra.