Aunque las olas del tiempo
te añadan corteza.
Nunca seremos nadie.
Aunque los trinos del viento
nos arranquen la serenidad.
Nunca seremos nadie
Aunque el horror del mediocre
nos ahogue con su rugido.
Nunca seremos nadie.
Aunque las manos de la mentira
dibuje bucles en la memoria.
Nunca seremos nadie.
Aunque la dicha en ojos ajenos
nos haga creer en mierdas.
Nunca seremos nadie.
Aunque el gozo del aderezo
nos perturbe con su armonía.
Nunca seremos nadie.
Aunque el bostezo del amor
nos resulte insoportable.
Nunca seremos nadie.
Aunque la dicha alcohólica
nos haga olvidar lo cierto.
Nunca seremos nadie.
Aunque la revolución sexual
nos invite al celibato.
Nunca seremos nadie.
Aunque tus ojos se apaguen
al ritmo de mi pereza.
Nunca seremos nadie.
Aunque la ausencia de la Razón
nos empotre entre las grietas.
Nunca seremos nadie.
Aunque los monstruos que genera el ruido
continúen pisoteándonos.
Nunca seremos nadie.
Aunque la belleza de las sonrisas
sean sombras macabras.
Nunca seremos nadie.
Aunque el odio educado
nos sorprenda con su bilis.
Nunca seremos nadie.
Aunque el piar de millones de anos
sea una marcha nupcial.
Nunca seremos nadie.
Aunque me arroje a tu olvido
deleitándome en tus lodos.
Nunca seremos nadie.
Reza conmigo....
Nunca seremos nadie.
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