Fumamos tumbados sobre la alfombra.
Su cabeza apoyada en mi tripa. Su pie derecho levantado, juega con la sombra que proyecta en la pared inventando historias de dedos que quieren ser manos.
Yo juego con su pelo fabricando bucles...
Me he corrido tres veces y se que ha de llegar una cuarta. Cerraré los ojos y me masturbaré. Ella se levantará y meterá una de sus tetas en mi boca. Yo seguire haciéndome una paja... es mi postre ... es mi momento... es el final que siempre me gusta tener... soy egoista.
Pero no hay prisa... me gusta sentir el peso de su vida en la mia aunque sea pagando. Tras varios años repitiendo sus servicios, hemos llegado a ser buenos amigos y, por el mismo precio, pasa la noche completa a mi lado...
Almas gemelas
recorren sus vidas
haciendo equilibrios
sobre anchisimos
puentes de tiempo
que...
Su voz rompe el instante inutil de mi poesia...
- Oficialmente, hoy he comenzado a olvidar..- me dice Olvido.
Su pie desciende lentamente... gira su cabeza y sus enormes ojos marrones se clavan en los mios.
- Yo pensaba que olvidabas cada noche con la llegada del amanecer... Siempre lo repites "El cliente es un pastel de humo que se disuelve al abandonar el hotel"..
Me abraza fuerte y me jode, porque cada vez que me abraza cierra sus ojos y el mundo vuelve a existir.
Se arrastra hacia mi boca y me llena de lengua.
Follamos de nuevo como si me quisiera.
Su cuerpo pegado al mio sin escenitas pornograficas, sin "follame hijodeputa", sin arañazos, sin mordiscos, sin tocarse el clitoris, sin pellizcarme los pezones... como si me quisiera.
Se corre con un gemido bajito a mil años luz de sus alaridos profesionales...
Queda tumbada sobre mi... mi polla enflaquece y sale sola de su coño.
Intenta aguantar el llanto.
- Este cliente - murmulla a trompicones - no quiere irse... Ha contratado tarifa plana. Es de fuera y ha venido para olvidarte... Y eso me va a costar mucho aceptarlo. No es del barrio, es extrangero... Alzheimer dice que se llama.
